Lo volvemos a hacer. Retomando el proyecto que iniciamos el pasado año, en este 2019 reformulamos la identidad gráfica de la Orquesta Clásica de Vigo en nuestro empeño por acercaros la música clásica desde una perspectiva contemporánea, alejada de las tradicionales etiquetas que se asocian a este género.
Si en 2018 nos inspirábamos en los experimentos acústicos de Chladni para rediseñar nuestra nueva imagen, este año tomamos como referencia el método Tonic sol- fa, desarrollado por el reverendo inglés John Curwen en 1841, tomando como referencia el modelo realizado por Sarah Anna Glover unos años antes.
Este sistema de aprendizaje de lectura musical se basaba en la representación de notas mediante signos realizados con las manos, que se situaban la diferentes alturas para marcar la entonación, subiendo desde la cintura hasta la cabeza a medida que aumentaban los tonos.
Este recurso resultaba de gran ayuda para enseñar al alumnado de canto que carecía de experiencia, ya que le permitía representar las notas en su mente antes de entonarlas.
Vínculo de color
En un intento de aproximar la propuesta de 2018 a la de 2019, decidimos tomar la paleta de color inspirada en las cerámicas tradicionales gallegas -empleada el pasado año- y confrontarla con su color complementario. Esto le otorga un inusitado impacto visual, convirtiéndose en un sujeto dinamizador de una imagen ya de por sí versátil.
